El adiós a Yatay, es un relincho prolongado y distante que llega, se va y perdura. Así transcurrieron sus días en el Relincho Pony Club de Villaguay siendo un ser fiel para las terapias y también para quienes en numerosas ocasiones lo entrenaban para alcanzar objetivos desde las difíciles variantes de la equitación.

Con participaciones a nivel provincial y nacional este excelente animal dio muchas satisfacciones a lo largo de su existencia y se convirtió en un modelo a seguir en cuanto a la instrucción y motivación, tanto para mejorar a los otros productos como para orientar en el camino de la equitación a quienes dieron sus primeros pasos en esta actividad que es un deporte y a la vez la práctica de montar a caballo.

La equitación es una especialidad dentro de los deportes ecuestres, y en ella se evalúa tanto al jinete como al caballo, por eso es muy importante además de placentera, aunque hay otros beneficios iguales de relevantes. Montar a caballo puede ser una experiencia única por sus aportaciones físicas y psicológicas.

Por todo esto en la muerte de este animal va implícito un tiempo de trabajo en conjunto con los instructores y aprendices que es una parte importante de las vidas de las personas porque se aprende a quererlo, respetarlo y guiarlo para que responda.

Yatay aprobó todo examen y lució deslumbrante en sus presentaciones permitiendo deslumbrar a sus jinetes y amazonas cuando participaron y mostraron sus habilidades y eso perdurará en el recuerdo de la comunidad del Relincho Pony Club.