Durante la celebración de "Corpus Christi", en Parroquia Santa Rosa de Lima de Villaguay se vivió un momento de adoración cantada y guiada por Lucas Basso, una voz que da paz y llena el alma. Eso se sintió al elevarse en las alturas del histórico templo dando a conocer ese don que pone al servicio de la fe y con una profunda convicción en su melodioso registro.

Las alabanzas que le surgen desde su interior se transforman en vibraciones que animan y se comparten de manera especial refrescando el corazón y el alma de los creyentes, eso y más sucedió viendo expresiones de los rostros de los presentes en esos momentos de entrega a un arte que no solo es gratificante sino que al compartirlo se multiplica como los panes.

No es solo escuchar, sino sentir y apreciar cuando en sintonía integral de mente, cuerpo y alma la música y la voz son una herramienta de gozo y caricia para los oídos, movilizando otros sentidos que lo permite la motivación de la palabra verdadera y transformadora.

No fue solo Lucas Basso, sino todo lo que movilizó a sacerdotes y las comunidades parroquiales para esta celebración la que dispuso a la feligresía, luego de la misa en Parroquia Inmaculada, en procesión y de una manera especial a atravesar la Puerta Santa y sumarse a esta alabanza de gloria a Dios, fue Su presencia la que permitió que todo pase, a pesar de las condiciones climáticas adversas.